Hay un término que está muy en boga y al que pocos alimentos escapan. Vinos, quesos, aceites, dulces y por supuesto embutidos, todos ellos bajo la denominación de productos ecológicos. ¿Pero a qué se refieren realmente? Lejos de ser una moda pasajera, se trata de una forma de ver la vida que cada vez tiene más adeptos y además es muy beneficiosa para la salud. En la entrada de hoy vamos a hablar un poco sobre el tema y nos adentraremos en el delicioso mundo de los embutidos ecológicos y naturales.
¿Qué es un embutido ecológico?
Todos los alimentos ecológicos han de regirse según la legislación europea y los embutidos no suponen una excepción. Esta normativa nos proporciona pautas relacionadas con la producción y la elaboración, estableciendo una serie de requisitos que deben cumplir los fabricantes.
Entre ellos, destacamos que la alimentación de los animales debe ser 100% natural y no se les puede suministrar medicamentos. También se regula la elaboración de los embutidos y en este sentido todo el proceso debe ser totalmente natural, sin ingredientes artificiales ni aditivos de algún tipo.
Solo los alimentos gourmet que cumplen todos los requisitos impuestos en la normativa se consideran ecológicos, teniendo el privilegio de lucir en su etiqueta del certificado oficial. Se trata de una garantía de calidad, tendrás la certeza de que el producto que tienes en tus manos posee un sabor increíble y ha sido elaborado siguiendo procedimientos totalmente naturales.
Embutidos ecológicos y embutidos naturales
¿Es lo mismo un embutido ecológico que un embutido natural? Hace poco la OMS hizo una declaración sorprendente en la que advertía que ciertos embutidos aumentaban el riesgo de cáncer, haciendo hincapié sobre todo en los ingredientes y procesos utilizados en su fabricación. En ese momento nos vimos bombardeados de información y por primera vez se popularizaron los términos embutidos ecológicos y naturales.
Para tu seguridad, los alimentos elaborados a partir de ingredientes naturales no solo no suponen ningún problema, sino que benefician a nuestro organismo. Otra cosa muy distinta son los embutidos industriales, con abundante presencia de aditivos alimentarios y mucha menos carne de la que te imaginas. Son por norma general productos de muy baja calidad y te aconsejamos que los evites en la medida de lo posible.
¿En qué se diferencian los embutidos ecológicos y naturales?
Tenemos que resaltar una cualidad, la naturalidad, como esencial en estos dos tipos de embutidos, obtenidos de forma artesanal y con ingredientes de la más alta calidad. ¿En qué se diferencian entonces? En la mayoría de los casos en la obtención del certificado, ya que existen numerosos fabricantes de embutidos naturales que no optan al mismo.
Por lo tanto, ambos alimentos son considerados gourmet y de valor similar, ya que los procesos de elaboración y la selección de ingredientes es prácticamente idéntica.
Súmate a la estadística que nos dice que un 10% de la población vasca consume habitualmente embutidos ecológicos y naturales, una opción deliciosa y mucho más saludable que sus contrapartidas industriales.