El Pastel Vasco tiene su origen en la región vascofrancesa de Lapurdi, pudiéndose encontrar en la actualidad en todo tipo de pastelerías, panaderías y restaurantes de nuestra tierra. Es tan popular que cada año se organiza un festival en su honor y tiene hasta su propio museo. En la entrada de hoy vamos a hablar de este postre tan emblemático, que también es conocido como Gâteau Basque, Etxeko biskotxa o Euskal pastela.
¿Qué es el Pastel Vasco?
Se trata de un pastel plano y redondo, con tonos que van desde el marrón claro al dorado y que se caracteriza por una textura muy suave y crujiente. La parte superior tiene un atractivo color brillante y puede decorarse de distintas formas, siendo la más habitual el “laburu” o cruz tradicional vasca.
Los ingredientes varían en gran medido dependiendo de la receta y el tipo de relleno que utilicemos, pero en general, la base de este postre se compone de mantequilla, harina, huevos y azúcar, estando delicioso tanto frío como caliente.
El primer antecedente del Pastel Vasco
El origen de esta receta no está demasiado claro, pero todo parece indicar que en los caseríos de Lapurdi ya se elaboraba durante la Edad Media. Los antecedentes de los Pasteles Vascos eran conocidos como Etxeko biskotxa o simplemente Biskotxa, que en castellano significa “pastel de la casa” y “pastel” respectivamente.
No tenían relleno y se elaboraban a partir de la masa de pan, resultando un alimento eminentemente rústico y con un sabor algo rancio. En sus comienzos se utilizaba harina de mijo mezclada con grasa de cerdo y miel, aunque posteriormente se sustituyó por harina de maíz proveniente de las Américas. La receta original por desgracia se ha perdido. Aun así, se considera a este Biskotxa como el antepasado directo del Pastel Vasco tal y como lo conocemos en la actualidad.
Evolución de la receta
Con el paso del tiempo, la receta ganó en popularidad, especialmente para los viajeros que recorrían la región vascofrancesa de Lapurdi. En el siglo XVIII, éstos comenzaron a llamarlo “gâteau des basques” o “pastel de los vascos”, un término que finalmente ha sido adoptado hasta nuestros días.
La receta evolucionó con los siglos y comenzaron a aparecer pasteles rellenos de frutas como moras, endrinas, higos y cerezas, que podían obtenerse sin problemas en los alrededores del caserío. A finales del siglo XIX se produce un repunte del turismo en Lapurdi y este postre vive una autentica edad de oro, apareciendo los primeros rellenos de crema.
El pastel vasco en la actualidad
Hoy en día, aunque el Pastel Vasco relleno de cereza sigue siendo el más famoso en la zona vascofrancesa de Lapurdi, en Euskadi y Navarra predominan los de crema. Sin embargo, podemos encontrar variedades con mermeladas, pasas, almendra en polvo, chocolate, vainilla, ron y multitud de ingredientes.
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