En la entrada de hoy vamos a hablar de los huevos centenarios, uno de los platos más curiosos y tradicionales de la gastronomía china cuyo aspecto y sabor es inimitable. La leyenda nos dice que hace 600 años un granjero encontró huevos de pato que habían sido cubiertos por una capa de arcilla. Preso del hambre, se decidió a cogerlos y después de limpiarlos bien descubrió entusiasmado que sabían de maravilla.
En realidad los huevos centenarios, también conocidos como del siglo o milenarios, tienen su origen en la necesidad de mantener este alimento comestible durante el mayor tiempo posible. Con el paso de las generaciones la costumbre se generalizó hasta el día de hoy, donde son muy apreciados y se sirven como aperitivo en celebraciones familiares como bodas y cumpleaños.
¿Cómo se elabora un huevo centenario artesanal?
La forma de preparar un huevo del siglo es un poco distinta a la de la leyenda, donde se utilizaba solo arcilla. En la actualidad, los huevos de pato o gallina se recubren además con cenizas, sal y cal viva, formando una capa exterior endurecida.
Con el paso de las semanas adquieren su característico color negro o marrón oscuro y dependiendo de la intensidad que se busque o las peculiaridades de la receta deben mantenerse en este estado durante un tiempo determinado.
El resultado es un alimento con olor muy fuerte y textura gelatinosa, con caprichosos patrones plateados provocados por la sal que parecen decorados a mano. Como decíamos, su olor es intenso y nos recuerda al azufre, queso o pescado, mientras que su sabor es simplemente exquisito. Aunque eso sí, no apto para todo el mundo.
Huevos centenarios industriales
Hoy en día el proceso de elaboración se ha industrializado y los huevos se sumergen en una solución ácida durante 10 días, para posteriormente envejecer en plástico durante unas semanas. El producto es prácticamente igual, pero eso no ha impedido que se sigan haciendo de forma casera en muchos hogares de China.
El huevo centenario en la gastronomía
Además de comerse como aperitivo junto a entrantes fríos, es común encontrar los huevos centerarios formando parte de otros platos. Se sirven acompañados de tofu y jengibre, a veces en rollitos y en otros países como Taiwán es un ingrediente habitual para preparar ramen con fideos de arroz, salsa de soja y caldo de carne o pescado. También se usan como relleno del dim sum y todo tipo de salteados con arroz.
¿El alimento más repugnante del mundo?
El huevo del siglo es el alimento más repugnante del mundo según una lista publicada por la CNNGo, que es la filial asiática de la CNN. Por delante incluso de platos como la carne de perro surcoreana o las tarántulas fritas de Camboya. Esto ha despertado la indignación de los principales productores chinos, como es el caso de Hubei Shendan Healthy Food Co, que ha denunciado que las votaciones se llevaron a cabo por personas que no habían probado un huevo centenario en su vida.